El
ayuno de agua es la práctica de la abstención de todos los alimentos por un período de tiempo. Por lo general es utilizado por aquellos que desean bajar de peso, obtener beneficios de salud, o ambas cosas. El ayuno se ha usado durante siglos como una manera de
limpiar el cuerpo y promover la curación, y sigue siendo reconocido por tener muchos efectos positivos significativos en el cuerpo.
Para las personas con buena salud, suele ser considerado un método seguro y natural para mejorar el bienestar general. Uno de los beneficios de
tomar agua en ayunas y no ingerir alimentos sólidos, es la pérdida de peso. Al eliminar todos los alimentos de la dieta, el cuerpo se ve obligado a recurrir a sus reservas de grasa para obtener energía, este uso de la grasa como combustible del cuerpo se conoce como cetosis, por lo tanto, es un método efectivo para
quemar grasas.
Durante el ayuno de agua, al cuerpo se le permite descansar y rejuvenecer, por lo tanto la práctica del
ejercicio en ayunas es discutible, ya que pueden ocurrir mareos y descompensación de energía pero por otra parte, se puede incrementar la
pérdida de peso con la ayuda de los
ejercicios. La energía que normalmente se utiliza para la digestión se redirige hacia la curación. Como las reservas de grasa se descomponen, muchas impurezas y toxinas acumuladas en los tejidos se sueltan limpiando el cuerpo; en este proceso, el cuerpo puede mejorar muchas dolencias.
Debido a sus
efectos curativos, el ayuno de agua se considera un tratamiento útil para una variedad de temas, se han demostrado resultados positivos por ejemplo para las personas que sufren de
artritis. Las personas con epilepsia pueden reducir los episodios de crisis a través del ayuno, tanto la enfermedad de la diabetes y las cardiovasculares suelen responder de manera positiva también. Aquellos interesados en
probar el ayuno de agua deben tener un enfoque gradual para acostumbrarse al proceso y comprender la manera de reaccionar del cuerpo. Un método consiste en comenzar a ingerir una sola comida al día durante un período de tiempo, y luego puede vivir un día completo de ayuno. Una vez acostumbrados a esto, los ayunantes pueden pasar a períodos más largos de tiempo, algunas personas optan por ayunar durante varios días, mientras que otros pueden hacerlo hasta por varias semanas.
Mientras que
se hace un ayuno de agua, se deben tomar alrededor de siete a diez vasos de agua al día. Se debe descansar mucho y abstenerse de
hacer ejercicios en ayunas. Una de las opciones es utilizar laxantes u otro método para eliminar toxinas antes de comenzar el proceso. El ayuno debe terminar poco a poco, empezando por la ingesta de zumos de frutas y sopas y luego se avanza lentamente a pequeñas porciones de
alimentos sólidos que sean fáciles de digerir