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Saber cómo cuidar adecuadamente los pisos laminados de madera desde el principio prolongará el brillo natural del piso así como también su atractivo y su duración. Preserva el brillo original de los pisos laminados de tu cocina limpiándolos regularmente. Esto evitará que el piso se raye debido a las piedritas, los residuos y la suciedad que haya llegado hasta la cocina. Lo más importante de todo es no usar los productos comerciales que se venden para limpiar este tipo de pisos.

1,Limpia el piso laminado con una escoba o una aspiradora que tenga un cepillo suave para quitar todo el polvo, la suciedad y las migas. Mantener los pisos limpios evita que se rayen y se opaquen.

2,Inspecciona el piso para ver si quedaron residuos. Una película de residuos puede hacer que el piso se vea opaco. Esto suele ocurrir debido a las limpiezas inadecuadas o poco frecuentes. Para eliminar los residuos del piso de la cocina, límpialo con un trapo y vinagre puro. Comienza con un área pequeña y sigue desde allí. Repite este proceso hasta que comience a aparecer el brillo que deseas. Una solución hecha con dos partes de agua y una parte de vinagre también sirve, aunque el vinagre puro es más fuerte. Para las manchas realmente difíciles, usa acetona o esmalte de uñas y frótalas con un paño húmedo.

3,No uses una cantidad excesiva de agua sobre los pisos laminados, ya que esto puede hacer que el piso se opaque y se dañe más. Usa una esponja limpia o un paño para absorber bien todo exceso de agua.

4,Deja que el piso se seque solo. De ser posible, no lo pises hasta que no esté seco.