18-03-2013, 11:54 AM
'Tip' de belleza: ¡no te saltes la limpieza nocturna de la piel!
Es una de las claves para evitar que se acaben formando granitos e impurezas.
Cada noche, tienes una cita a la que no puedes fallar… ¡con la limpieza de tu piel! Sí, sabemos que tienes ganas de irte a la cama, de descansar tras un día intenso y, en ocasiones, cedes a la tentación de meterte entre las sábanas, y dejas de lado esta rutina indispensable, pero sabes que es un error.
Argumentos para convencerte
Aunque no te hayas maquillado, tu piel no llega a la noche limpia. La producción de grasa es la causa principal de que la limpieza nocturna se haga más importante que nunca, especialmente si se quiere evitar que se acaben formando granitos e impurezas. Al salir más sebo, éste se puede quedar sobre la piel, taponando los poros y acabando en puntos negros. Hay que elegir un producto que limpie con suavidad, haciendo especial énfasis en las zonas más grasas, como las aletas de la nariz.
Además, también influyen los agentes medio ambientales como la contaminación, que depositan sobre el rostro un velo de impurezas que conviene eliminar.
Un truco: Aclara con agua tibia y finaliza siempre con agua fría, que ayuda a cerrar los poros.
Es una de las claves para evitar que se acaben formando granitos e impurezas.
Cada noche, tienes una cita a la que no puedes fallar… ¡con la limpieza de tu piel! Sí, sabemos que tienes ganas de irte a la cama, de descansar tras un día intenso y, en ocasiones, cedes a la tentación de meterte entre las sábanas, y dejas de lado esta rutina indispensable, pero sabes que es un error.
Argumentos para convencerte
Aunque no te hayas maquillado, tu piel no llega a la noche limpia. La producción de grasa es la causa principal de que la limpieza nocturna se haga más importante que nunca, especialmente si se quiere evitar que se acaben formando granitos e impurezas. Al salir más sebo, éste se puede quedar sobre la piel, taponando los poros y acabando en puntos negros. Hay que elegir un producto que limpie con suavidad, haciendo especial énfasis en las zonas más grasas, como las aletas de la nariz.
Además, también influyen los agentes medio ambientales como la contaminación, que depositan sobre el rostro un velo de impurezas que conviene eliminar.
Un truco: Aclara con agua tibia y finaliza siempre con agua fría, que ayuda a cerrar los poros.