11-04-2012, 11:54 AM
Cita:Fíjate bien en los componentes de tus cosméticos para evitar reacciones.
Además, un porcentaje similar padece alguna alteración en la piel, como acné, dermatitis atópica, eccemas, hipersensibilidad… que las hace más vulnerables a estos problemas.
El estudio por la Fundación Rementerí, demuestra que el uso del “maquillaje durante toda la vida “ puede tener consecuencias a largo plazo en el ojo, sobre todo en un ojo más sensible.
Aún más lesivo es en quienes usan lentes de contacto, ya que agrava los riesgos asociados a las mismas, como ojo seco e irritación, pero también infección.
“La consecuencia más leve son molestias e intolerancia a la lentilla pero lo más grave puede ser favorecer infecciones, que en los portadores de lentillas son mucho más graves, por una bacteria que se llama pseudomona, que a veces son muy difíciles de tratar y que pueden dejar cicatrices en la córnea”, añade el experto.
De las mujeres que utilizaban delineador, la mitad lo usaban en la base de las pestañas y la otra mitad por dentro de las pestañas, “con lo que el ojo está más expuesto a molestias, enrojecimiento, conjuntivitis tóxica o intolerancia a las lentes de contacto”, según el Dr. Hurtado, quien recomienda que el delineador, el rímel y la sombra de ojos se apliquen por fuera de la pestaña.
Componentes peligrosos
Respecto al tipo de productos que se utilizan para realzar los ojos, ocho de cada diez emplean más de un producto y dos de cada tres utiliza rímel, sombra de ojos o delineador.
Los productos utilizados para desmaquillarse pueden ser más peligrosos, advierte el Dr Hurtado, debido a que los disolventes alteran la lágrima.
Además, “al desmaquillarse durante muchos años se desarrolla más laxitud en el párpado, la piel se arruga más, y puede que el párpado se estire hacia fuera o hacia dentro o incluso que aparezcan bolsas”.
Para desmaquillarse, el 34% de las encuestadas utilizaba leche limpiadora, el 30% productos especiales, el 16% gel, el 6% toallitas desmaquilladoras y el 4% agua micelar. Un 10% usaba otros productos. Sin embargo, el 78% de las entrevistadas reconoció que no había mirado nunca la composición de los cosméticos que utiliza.
Entre los componentes y tintes utilizados en el rímel y en el delineador se encuentran solventes como el isododecano, formadores de película, conservantes y ceras de origen animal, vegetal y mineral; así como pigmentos y polímeros fijadores.
Los maquillajes con resistencia al agua contienen además disolventes similares a la pintura al óleo. ”El aspecto es muy similar”, explica la maquilladora profesional Carmen Otero. El rímel que pretende dar a las pestañas una apariencia más larga contiene fibras de nylon que se adhieren a ellas “y que puede provocar sensación de cuerpo extraño o molestias conforme avanza el día, sobre todo cuando contiene compuestos nacarados”.
En un estudio sueco publicado en el International Journal of Cosmetic Science se evaluaron siete máscaras o tipos de rímel y dos de ellas indujeron un enrojecimiento de la piel cuando se aplicaron en una piel normal. Las dos se basaban en una emulsión convencional con estearato como emulsificador principal, una sustancia irritante que podría causar más molestias o problemas en pieles sensibles o con enfermedades.
Las revisiones de ingredientes cosméticos realizadas por paneles de expertos para la Administración norteamericana en 2008 concluyeron que componentes como la hexamidina, que se emplea en rímeles, cremas y delineadores “son seguros en concentraciones inferiores a 0,1%”, al igual que los ingredientes derivados del capsicum, del ácido glicirrético (ácidos y sales), del alcohol n-butil o de otros alcoholes.
A pesar de ello, todos estos informes, publicados en la revista International Journal of Toxicology,indican que
“hay falta de conocimiento en las dosis aplicadas así como falta de información sobre su presencia en productos de limpieza, higiene o maquillaje”.