26-02-2012, 12:40 PM
Mirad ese video, no tiene desperdicio, es precioso!
http://www.diariosur.es/videos/actualida...acido.html
Hace tiempo que los científicos se hacen la misma pregunta. ¿Qué condiciona más a un ser humano? ¿La genética o el entorno? El documental de Thomas Balmés que se estrenará el próximo 29 de abril ha hecho la prueba.
Ha seguido el primer año de vida de cuatro bebés en lugares tan dispares de la tierra como Mongolia, Nigeria, Estados Unidos y Japón. Ponijao de Namibia jamás va a gatear por un suelo impoluto como Hattie de California, mientras que a Mari la pasean por Japón bajo la sombrilla, Bayar tiene que inspeccionar Mongolia él solito.Hay a quién mamá le lava con su saliva, quién comparte barreño y quién no aprenderá a valorar el agua corriente y potable como un lujo.
A veces, un chupete es una simple gasa y una cerilla.Alguno tendrá que ir al zoo para ver a animales, otros tendrán mascotas dóciles o no. La japonesa se entretiene rodeada en la guardería y al africano le basta con un charco. A la niña americana la protegen, aunque habrá golpes que ni papá pueda evitar. Desde que ponemos los pies en la tierra notamos que el equilibrio no existe.
http://www.diariosur.es/videos/actualida...acido.html
Hace tiempo que los científicos se hacen la misma pregunta. ¿Qué condiciona más a un ser humano? ¿La genética o el entorno? El documental de Thomas Balmés que se estrenará el próximo 29 de abril ha hecho la prueba.
Ha seguido el primer año de vida de cuatro bebés en lugares tan dispares de la tierra como Mongolia, Nigeria, Estados Unidos y Japón. Ponijao de Namibia jamás va a gatear por un suelo impoluto como Hattie de California, mientras que a Mari la pasean por Japón bajo la sombrilla, Bayar tiene que inspeccionar Mongolia él solito.Hay a quién mamá le lava con su saliva, quién comparte barreño y quién no aprenderá a valorar el agua corriente y potable como un lujo.
A veces, un chupete es una simple gasa y una cerilla.Alguno tendrá que ir al zoo para ver a animales, otros tendrán mascotas dóciles o no. La japonesa se entretiene rodeada en la guardería y al africano le basta con un charco. A la niña americana la protegen, aunque habrá golpes que ni papá pueda evitar. Desde que ponemos los pies en la tierra notamos que el equilibrio no existe.